Llegó el 15M… la gente tomó las calles
en el ruidazo del #15m en diversos puntos del país. El reclamo fue contra el
ajuste indiscriminado de las empresas que prestan servicio en la comunidad que
no está en “común unidad” con su “servicio”. El gobierno del hombre CEO es el
lobo del propio hombre.
Llegó el 1A... La marcha fue convocada
para “defender la democracia”. Curioso, porque no está en peligro. A diferencia
de la del 15M en esta respaldaron abiertamente a Mauricio Macri a pesar de los
ajustes y despidos.
Entre las
exclamaciones la que se pudo registrar es el respaldo a los militares, a la
época represiva que estos ejercieron y justificando sus métodos:
“desaparecieron los que tenían que desaparecer”. También se escucharon algunos
insultos y el ya consabido "no vuelven más" que le gusta repetir a
los opositores a la oposición.
Otra de las
frases escuchadas es que “en 15 meses no se puede revertir 12 años de corrupción”…
Es cierto, no es fácil revertir 15 meses de descalabro político, social y
ético. Niembro, Panamá Papers, Correo, Avianca, los sobres de Michetti, las
armas, Arribas, la represión, la justificación de que los desaparecidos están
bien desaparecidos, el 40% de inflación en 12 meses, más pobres que en 2015
(algo más de un millón), tarifazos con un vuelto para Aranguren, Jueces
presionados como nunca (como la jueza Servini de Cubría por ejemplo),
endeudamiento fenomenal, presidente con record de vacaciones, presidente que
pudo conocer a Máxima Zorreguieta (Reina consorte) pero no sabe de la mínima
que cobra un jubilado, miles y miles de despedidos, y la lista sigue...y hasta
se fastidian con Francisco....incorregibles.
Otra de las
frases: “Soy democrática y buena”, pero entre las marchas de las últimas
semanas, el emblemático “sánguche” nacional (sándwich) quedó dividido por la
grieta. ¿Por qué un embutido de carne trae tanta cola? quizás por su implicancia política que lleva
a que se exprese como: “Sin choripanes y sin micros”[1]. La
idea es diferenciarse, sentirse superior. Si ellos comen choripán, yo como
sushi o cualquier ensalada que tenga rúcula entre sus ingredientes. No importa
que el choripán sea más rico. No. Nada importa. Si los feos, sucios y malos
comen eso, yo como otra cosa. De ahí que el término adopte otro término en
forma despectiva con el adjetivo de “choriplanero” para expresar su desprecio
hacia el que piensa diferente. Y el presidente abona a ese dogma con
declaraciones que agrandan la grieta, estigmatizan a todos los que se
manifestaron en marchas multitudinarias a lo largo de todo marzo y privan a sus
seguidores de saborear uno de los manjares más exquisitos de la gastronomía
popular.[2]
Otro de los
datos curiosos fue que se hizo presente Cecilia Pando pidiendo por la Democracia siendo que
ella revindica el accionar de los militares que actuaron en la última dictadura
cívico-militar. El otro dato, ya no curioso por lo que venimos analizando en
este ensayo, que en la ciudad de Córdoba en el momento de la convocatoria en
apoyo a la Democracia
y al Presidente se podía ver a unos manifestantes con el cartel que decía “los
Derechos Humanos son un curro” y por el otro ver desfilar a un falcon verde
(símbolo de la última dictadura militar y de los secuestros del gobierno de
facto y dueños de la frase “los argentinos somos derechos y humanos”) con un
militar parado arriba, llevando consigo la bandera argentina.
Cito a
continuación un texto del Dr. Hugo Seleme[3], del
cual lo considero pertinente y que aclara la visión argentinómica, titulado:
Conservadurismo
Los valores morales y políticos poseen un
enorme poder revulsivo frente a situaciones de injusticia. Si uno valora la
igualdad, no puede permanecer impávido frente al aumento de la pobreza. Si se
valora la democracia, no se puede dejar sin castigo al que incumple promesas de
campaña. Si se valora la honestidad, debe escandalizar que un funcionario posea
empresas en paraísos fiscales. Si se valoran los derechos humanos, debe
condenarse que alguien permanezca arbitrariamente detenida. Los valores mueven
a la acción.
Por esta razón, sostener una moralidad
política conservadora en una situación de injusticia no es más que otro modo de
ser inmoral.
El conservador pretende preservar lo que la
justicia exige cambiar. El conservadurismo ve con recelo el poder movilizador
de los valores. Representan una amenaza para el mantenimiento de sus
privilegios que necesita ser neutralizada. La amenaza es grave porque cuando
los valores son combatidos de manera frontal y directa, su poder revulsivo se
potencia.
Si la desigualdad, la estafa electoral, la
deshonestidad y la vulneración de derecho humanos es defendida abiertamente, la
resistencia generada sería formidable. Los valores morales son resilientes
frente al mal.
Por esta razón la estrategia conservadora
usualmente es diferente. Consiste en enfrentar un valor moral con otro. Cuando
un gobierno democrático amenaza sus privilegios, son republicanos preocupados
porque los derechos individuales – básicamente sus derechos de propiedad – no
sean tocados. Cuando se reclama porque los derechos humanos no sean
transgredidos, son federalistas respetuosos de la autonomía provincial, aún la
autonomía de violar garantías individuales. Cuando se protesta por el aumento
de la desigualdad y la pobreza generada por las mismas políticas gubernamentales
que perpetúan sus privilegios, son demócratas convencidos dispuestos a defender
la voluntad popular con su propia vida. Cuando se pretende regular el mercado
para evitar sus excesos, son fervientes defensores de la libertad. Cuando se
defiende la libertad de vivir de acuerdo a las propias preferencias,
orientaciones y convicciones, son defensores del orden y la regulación.
El conservador ama a la Patria y odia a sus
conciudadanos, no grita para ser escuchado sino para que otros callen, se
moviliza para que todo permanezca inmóvil.
La grieta a
pleno. Esa resiliencia de la que habla el Dr. Seleme es lo que sacó adelante al
actor cordobés, Christian Petersen, que hace unos 13 años que vive en Buenos
Aires, donde hace por lo menos cinco años que recita poemas de Galeano en la Línea A del Subte. El
hecho se produjo cuando varias personas que llevaban banderas argentinas
comenzaron a gritarle de manera cada vez más efusiva: "¡Vos no podés traer
ideología acá, vos no podés recitar a Galeano!" luego que Christian dijese
la frase dedicatoria “para quienes se van cayendo de este mundo sin hacer ruido
al caer” que engloba un poco la idea del poema Los Nadies, publicado en el
Libro de Los Abrazos. Le contestó a unas de las señoras que lo increpaba: “Señora,
lo que usted está haciendo es ideología también. Yo estoy trabajando”, le dijo
Christian. “¿Un trabajo? -se preguntó la mujer, a la vez que se autorespondió-
Vos sos un vago”. Hasta uno de los embanderados le quiso pegar físicamente.
Tras el violento
episodio. Christian permaneció en el vagón, confundido, sin saber qué hacer. Hasta
que, según sus propias palabras, “me nació no permitirles esa censura tan alevosa
que estaban cometiendo… arranqué de nuevo el poema y lo recité entero, sin él
ímpetu que le pongo siempre, pero necesitaba hacerlo. Fue intuitivo, una
reacción libertaria desesperada”[4]. Eso
es la resiliencia. Esa es la intolerancia de los tolerantes.
Llegó el 6A Paro General… Pasaron más
de 15 años de la última vez que todo el sindicalismo argentino protagonizó una
huelga general. Fue el 13 de diciembre de 2001, en la agonía del gobierno de la Alianza.
El primer paro
nacional contra Mauricio Macri fue contundente y no sólo por el transporte, que
siempre es decisivo. También en los grandes centros industriales e incluso en
gremios –como los de transporte aéreo- donde la mayoría de los afiliados
votaron a Cambiemos. Sin embargo, la unidad que escenificó el paro precisa una
continuidad que no aparece clara. El proceso que se inicia ahora está gobernado
por los interrogantes.
Con el paro
nacional consumado, el gobierno tiene la posibilidad de retomar la negociación
y ceder en una agenda que contemple los reclamos sindicales: lo que pretende el
triunvirato cegetista. Bastante más difícil parece que la alianza Cambiemos
modifique su modelo económico, menos todavía después de la movilización del 1
de abril en apoyo al gobierno.
La euforia
oficialista ya no disimula el deprecio por lo popular. Los choripanes, los
colectivos, los bombos, la calle, los paros, los piquetes. Una batalla cultural
que incluye hacer pública y política la humillación que las patronales
descargan sobre un laburante en la vida cotidiana de mayorías precarias que no
saben lo que es un sindicato.[5]…
veremos qué tiempo pasa hasta el próximo paro general.
Hay una nota
publicada en Diario Argentino que expresa el concepto de “argentinomia” que
esgrime un informe periodístico de canal 13 al fomentar la antinomia
kirchneristas-macristas: “La grieta ya fue. La tan nombrada y vituperada
palabra que se usó hasta el hartazgo para dejar de manifiesto la separación
entre kirchneristas y antikirchneristas más tarde devenidos en macristas dejó
de tener sentido. Según el diccionario, una grieta es una abertura alargada y
con muy poca separación entre sus bordes. ¿Muy poca separación? Ja. Chau
grieta, es hora de empezar a hacer referencia al abismo que separa a las dos
formas de pensar predominantes. El odio que se destila de un lado y del otro es
tan profundo que al sobrevolar ese abismo se hace cada vez más difícil ver el
final del precipicio.
El periodista de
Clarín, TN, Canal 13 y todos los medios del mayor multimedios del país, Nicolás
Wiñazki hizo un informe en Telenoche denunciando que “más de cuatro mil
empleados estatales son kirchneristas”. La poca precisa investigación
periodística dice que unos “cuatro mil empleados del PAMI fueron puestos por el
gobierno anterior”. Pero tampoco da datos concretos al asegurar que “Télam (la
agencia estatal de noticias) es un caso crucial” porque “hay 200 empleados que
responden al kirchnerismo”. Según explicó el periodista, estos colegas suyos
trabajan en la gerencia de Audiovisuales y desde allí hacen “kirchnerismo
explícito” y emiten cables con “propaganda K”.
Más allá de que
en Audiovisuales de Télam no se escriben cables, la denuncia pierde fuerza al
revisar los despachos (justamente) audiovisuales de la agencia. En los últimos
cincuenta videos enviados, cuatro son declaraciones de Mauricio Macri
repudiando el paro, uno es de Marcos Peña en el mismo sentido, siete son
acciones del Gobierno mostrando la gestión, uno es sobre la conferencia de
prensa que dio Barros Schelotto y el resto se reparte entre noticias
internacionales y policiales. Pero aunque no fuera así, sería correcto que
hubiera otro tipo de información porque Télam es una agencia del Estado y no
del Gobierno, aunque esto parezca una utopía en la Argentina. Y es una
utopía porque todos los gobiernos (y acá no hay nadie a quien no le quepa el
sayo) transformaron a los medios nacionales en oficialistas, cada cual con su
estilo. Todavía se recuerda que en el canal de televisión estatal durante el
menemismo se veía a cualquier hora del día a Gerardo Sofovich timbeando, por
ejemplo. El programa Seis, siete, ocho es otro claro botón de muestra. Y ni que
hablar de las aberraciones que ocurrieron durante la dictadura.
Quizás la
diferencia entre los que están de un lado del abismo y los que se parapetan del
otro sea que durante el gobierno anterior, en sintonía con la forma de actuar
imperante en ese momento, desde los medios oficiales se denunció a una decena
de periodistas poderosos y (en su mayoría) millonarios, mientras que ahora se
“investiga” a 200 trabajadores de prensa, también muy de acuerdo con la forma
de actuar que caracteriza a quienes conducen el país desde el Poder Ejecutivo.
Pero es innegable que las acciones van en un sentido muy parecido. Y todo eso
contribuye a profundizar el abismo.
Algunos
analistas políticos y un buen número de historiadores sostienen que esta
separación en la sociedad existe desde que Argentina es Argentina. Afirman que
se hizo más explícita en las décadas del 40 y 50 del siglo pasado, cuando nació
el peronismo y el antiperonismo. Pero el abismo actual parece ir en busca del
infinito. Y este tipo de informes, como el del noticiero central de Canal 13,
contribuyen a tirar ramas secas a la fogata.”[6]
Habíamos señalado al comienzo de este
ensayo la importancia de la nueva ley de comunicación que llevaba adelante el
AFSCA, hoy ENACOM, al otorgar a radios de poca envergadura la posibilidad de
tener su espacio radiofónico en regla y en libertad de opinión. Muchos fueron
los medios que se beneficiaron y a los cuales los grandes medios se tendrían
que adecuar pero pusieron muchos palos en la rueda para no hacerlo. Hoy Clarín
no solamente que no se adecuó sino que avanzó por más espacio, cosa que pudo
lograr con este gobierno por las facilidades que se les otorgara. Pero no basta
con conceder hay que despejar todo indicio de estorbo. Por decreto, publicado en
el Boletín Oficial salió una resolución que faculta al Enacom (ex Afsca) a
"disponer la clausura, secuestro, apercibimiento, multa y/o comiso", por
la fuerza si es necesario, de medios de radiodifusión alternativas y
comunitarias.[7]… sin dudas aquel que
maneje la información tendrá el poder.
La ex legisladora Silvana
Giudici, quien fue designada a comienzo de año como directora por el Poder
Ejecutivo en el Ente Nacional de Comunicaciones (ENACOM), el organismo que
asumió las funciones de las disueltas AFSCA y AFTIC, es quien motoriza el
decomiso de medios comunitarios. Giudici había expresado: "Me parece que
lo más positivo es el mensaje: se termina la guerra con los medios, con los
periodistas, el control del relato, eso es central y se abre una nueva era de
innovación, se va a intentar a través de la unificación del AFSCA y la AFTIC , generar redes de
telecomunicaciones en la
Argentina y dar un salto cuantitativo". Esa, es la
posición histórica del multimedio Clarín, quien históricamente considero a los
medios comunitarios, locales y regionales como "truchos".
Sin lugar a dudas que si se
cierran estos medios habrá más desocupación, pero eso no les interesa al
gobierno del cambio. Ellos ahora determinan quién es legal y quién no. Ellos
con todo el espacio adquirido son legales.
Pero si de perder soberanía se
trata sin lugar a dudas esta es una muy grave, también publicada en el Boletín
oficial: "EL PRESIDENTE DE LA NACIÓN ARGENTINA DECRETA:
ARTÍCULO 1° — Facúltase por hasta un monto que no
supere la suma de VALOR NOMINAL DÓLARES ESTADOUNIDENSES VEINTE MIL MILLONES
(V.N. U$S 20.000.000.000) o su equivalente en otra moneda, al MINISTERIO DE
FINANZAS, a través del Órgano Responsable de la Coordinación de los
Sistemas de Administración Financiera del Sector Público Nacional, a incluir
cláusulas que establezcan la prórroga de jurisdicción a favor de los tribunales
estaduales y federales ubicados en la Ciudad de NUEVA YORK —ESTADOS UNIDOS DE
AMÉRICA—, y/o de los tribunales ubicados en la Ciudad de LONDRES —REINO UNIDO
DE GRAN BRETAÑA E IRLANDA DEL NORTE—, y que dispongan la renuncia a oponer la
defensa de inmunidad soberana, exclusivamente, respecto a reclamos que se
pudieran producir en la jurisdicción que se prorrogue y con relación a los
acuerdos que se suscriban y a las emisiones de deuda pública que se realicen
con cargo al presente decreto, y sujeto a que se incluyan las denominadas
“cláusulas de acción colectiva” y cláusula de “pari passu”, de conformidad con
las prácticas actuales de los mercados internacionales de capitales…."[8]…
seguramente que con esta medida lo que se quiere generar es “confianza"
para que vengan a invertir en Argentina. No se trata de darles confianza a
ellos sino de darnos confianza a nosotros y eso está cada vez más lejos. No van
a venir a invertir si hay malestar social, eso los buitres lo saben, esperaran
a hacer otro embargo que le es más redituables como por ejemplo el embargo a
bienes del ejército.
[1] Choripan: comida popular que consiste un
chorizo dentro de una hogaza de pan condimentado con salsas picantes
popularmente conocido como “chimichurri”, también mayonesa, Ketchup o mostaza.
Micro:
se llama en bs. As a los coches del servicio de transporte público urbano. En
la Ciudad de Córdoba se los llama “colectivos” o “bondis”.
[2] Texto adaptado de http://www.tiempoar.com.ar/articulo/view/66076-el-choripan-como-bandera
[3] Titular de la Cátedra de Ética de la UNC , Investigador del Conicet,
Director del Programa de Ética y Teoría Política.
[4] Relato adaptado de http://www.tiempoar.com.ar/articulo/view/66101/marcha-1-a-intentaron-bajarlo-del-subte-por-recitar-a-galeano
Consultado el 05/04/2017
[5] http://www.lavanguardiadigital.com.ar/index.php/2017/04/07/paro-general-incertidumbre-colectiva/
Consultado el 08/04/2017
[6] http://www.tiempoar.com.ar/articulo/view/66178/wia-azki-un-bidonero-de-la-grieta-que-ya-es-abismo
Consultado y adaptado el 07/04/2017
Dejo mi saludo ritual como un apretón de manos o un "Ave María Purísima", Firme y Digno, Bocha... el sociólogo.
NdE: Prohibida su reproducción total o parcial sin el consentimiento del autor, ya que la misma es parte de un ensayo.
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